Consejos para saber integrase en un empleo

Todo profesional pasa por la experiencia de ser el “nuevo” cuando comienza su vida laboral o al momento de aceptar nuevos desafíos. El llegar a un ambiente desconocido provoca cierto temor que las empresas intentan superar a través de programas de bienvenida e integración.
Uno de los momentos más significativos en la vida de un profesional es casi siempre su primer día de trabajo. La incertidumbre por no saber cómo se será recibido, el desconocimiento de los compañeros o las responsabilidades que se asumirán pueden jugar más de una mala pasada.
Período de adaptación
Es claro que la adaptación puede durar semanas, es por eso que algunas compañías han puesto en marcha programas de bienvenida y aprendizaje para acelerar la integración de los nuevos trabajadores.
Según los expertos quienes se integran deben enfrentar este período con una gran empatía, a fin de estar abiertos a los consejos de quienes tienen más experiencia en la organización y ser más flexibles ante el cambio que significa estar en lugar que aún no es familiar. Asumiendo esta actitud se puede hacer más fácil la adaptación al clima laboral y la cultura organizacional.
Entre los consejos que se suelen dar para aminorar los efectos de ser el recién llegado están el investigar lo más que se pueda a la compañía con el objeto de entender los procesos de internos. También es bueno que se consulte por las características del puesto que se va ocupar y en caso de llegar a reemplazar a alguien preguntar por lo bueno y lo malo que tenía su predecesor. Además, es aconsejable que consulte a sus jefes por los criterios de evaluación, porque estos suelen varias de una entidad a otra.
Fortalecer la relación con los compañeros
Junto con este perfil profesional se debe trabajar el aspecto social y para ello el ser cordial con el resto del equipo, pero teniendo cuidado de no caer en la adulación, puede ayudar bastante para ganar un espacio. La mesura y la prudencia son otros valores que serán bien apreciados. El querer comunicar no significa que se divulgue la vida completa a personas que se vienen conociendo hace poco, ni que se hable mal de su antigua empresa o compañeros.
Se debe ser tolerante, en especial con aquellos que muestren formas de conductas que no se compartan. La paciencia es otro elemento al que se debe recurrir, en especial en las primeras semanas que pueden ser las más difíciles. Según estudios en gestión de personas que alguien esté completamente cómodo en un nuevo trabajo puede tardar unos seis meses.
Para asimilar mejor el nuevo escenario es bueno acercarse a quienes se muestran más afables. Lo más seguro es que brinden buenos consejos de cómo es el ambiente laboral y con quienes se puede bromear. Así también hay que identificar y poner atención al líder de la oficina, quien no necesariamente es el jefe, sino alguien que influye en el resto. En este mismo sentido se recomienda conocer los canales de comunicación informal que se utilizan.
Ahora si al llegar al nuevo trabajo se es visto como una amenaza, lo mejor es desarrollar una gran capacidad de observación y aprendizaje para paso a paso ganar la confianza de los compañeros. En la búsqueda de este objetivo hay que intentar no involucrarse con las tareas del resto, a menos que soliciten ayuda y dar una opinión sólo cuando se nos consulte.